Las ventas y el valor de Nike en bolsa cayeron en 2024 como no había ocurrido antes. La situación no es fácil, ¡pero aprendamos de ella! Hoy te entrego los detalles de este caso que ofrece demasiadas lecciones de estrategia, marca, CX y marketing, para todos los empresarios del mundo.
¿Quién no ha sido un fan de Nike? Yo, siempre. Admiro su branding tan genial; su estrategia de marca, una de las buenas razones por las cuales Nike es Nike, sin lugar a dudas.
Pero las fiestas siempre tienen su fin. O, al menos, sufren de horas aburridas. Y es lo que está viviendo esta gran compañía. Está enfrentando una crisis que es una combinación de malas decisiones estratégicas, errores de innovación, problemas de mercado y competencia feroz. Bienvenido(a) a este desglose de lo que le está pasando y los aprendizajes ORO para todo empresario.
- La Tormenta Perfecta: ¿Cómo Llegamos Aquí?
- John Donahoe y el cambio de CEO en medio de la crisis: John Donahoe dejó su cargo tras un año desastroso en ventas y estrategia. Lo reemplazó Elliott Hill, un veterano de la marca con la tarea de rescatar el barco (y cuando lo hizo las acciones subieron 7%).
- El error extremo del “Direct-to-Consumer”: Nike (con Donahoe al mando) decidió cortar lazos con más de la mitad de sus socios mayoristas, incluyendo gigantes como Amazon, Macy’s y Foot Locker, pensando que vender solo a través de sus tiendas y sitio web sería más rentable. Sonaba bien el cuento, en teoría (más margen, más control), pero terminó siendo un error garrafal. Dejó escapar clientes y abrió espacio para la competencia.
- John Donahoe quiso hacer de Nike una compañía tech… y no le salió tan bien: Venía de eBay y de Bain, por lo que estaba convencido que el mundo pertenece a las tech. En realidad, tenía la visión de hacer de Nike una empresa principalmente tecnológica, animado por las ventas digitales que ocurrieron durante la pandemia y los meses subsiguientes. Pero no contaba con la astucia de que a muchísima gente todavía le gusta ver y tocar el zapato.
Esa visión hizo, además, que descuidara la experiencia del cliente en tiendas. No sólo eso: su enfoque obsesivo en la tecnología le hizo desestimar también la innovación constante.
Vale la pena mencionar que últimamente cuando entro (yo) a una tienda Nike en Estados Unidos, me ha llamado la atención que la experiencia es demasiado simple, fría, apática, insípida. Demasiado normal. Tanto, que siempre entro ilusionado pero salgo con las manos vacías. Y ahora, gracias a todo este análisis, racionalizo que también salgo medio defraudado de que una marca que tanto admiro, que se supone que es tan enorme, tan linda, tan inspiradora… no sea capaz de diseñar una experiencia en tienda tan memorable como su branding.
Sigamos…
- Desconexión con la industria: Donahoe carecía de experiencia en calzado y retail físico, lo que llevó a malas decisiones en distribución y productos.
- Reacción tardía a la crisis: En 2023, ante la caída de ingresos, anunció recortes de $2,000 millones y despidos del 2% del personal, generando incertidumbre y afectando la moral interna.
- Excusas en lugar de soluciones: Admitió la falta de innovación, pero culpó al auge del trabajo remoto en lugar de asumir errores en liderazgo y estrategia. Parecía evidente que no contaba con el bastón de mando ideal dentro de su organización.
2. Los Números de la Tormenta
- El desplome de las acciones: En junio de 2024, las acciones cayeron un 21% en un solo día, la peor caída en la historia de Nike, perdiendo $24 mil millones en capitalización.
- Desempeño bursátil pobre: En 2024, las acciones de Nike cayeron 28%, mientras el S&P 500 creció 23%.
- Caída en ingresos: En el segundo trimestre de 2024, las ventas cayeron 8% a $12.35 mil millones.
- Mala comparación con competidores: Nike perdió 9% en ingresos proyectados para 2025, mientras Lululemon (pese a también caer) mantiene márgenes de 59% frente al 43.6% de Nike.
- De Estrategia Maestra a Desastre en Cámara Lenta
- El regreso a lo tradicional: Tras perder ventas, Nike no tuvo más remedio que recular; volver a sus antiguos socios mayoristas. Y… bueno… volver con la cola entre las piernas nunca es buena estrategia.
- Stock sobrevalorado: En 2021, Nike valía más de $170 por acción, pero esto estaba inflado por la pandemia y el hype de productos como los Dunks y los Air Jordans. La realidad golpeó fuerte en 2023 y 2024.
- Sobreproducción y saturación: Nike explotó demasiado sus modelos icónicos (Dunks, Air Force 1, Air Jordan 1) hasta el punto de agotarlos. Si todo el mundo los tiene, pierden exclusividad y deseo. Y si no tienes suficiente innovación… pues… difícil que la vida te sonría.
- Falta de ajuste a la nueva realidad: El consumidor post-pandemia cambió, busca calidad, comodidad y productos innovadores. Nike se quedó estancado en su antigua fórmula.
- Innovación: El Talón de Aquiles
- Nike dejó de innovar: Hace años, la marca sorprendía con tecnología revolucionaria como el Air Max o el Flyknit. Hoy, se siente repetitiva.
- Mientras tanto, la competencia innova: On y Hoka crecen con tecnologías avanzadas de amortiguación y diseño. New Balance y el mismo Asics usan materiales premium y diseños frescos. Nike sigue vendiendo Dunks como si estuviéramos en 2020.
- El fallo de los lanzamientos recientes: Modelos como el Air Max DN no capturaron la atención del mercado. Nike parece estar buscando la próxima gran idea, pero nada que la encuentra.
- Problemas de Marketing y Cultura de Marca
- Nike perdió su “street cred”: En los 90s y 2000s, Nike era sinónimo de cool. Ahora, parece una empesa más preocupada por la logística que por la cultura.
- Errores en lanzamientos: La zapatilla de Devin Booker fue un desastre en comunicación y distribución, confundiendo a los consumidores.

- Campañas de marketing inconsistentes: Mientras la campaña “Winning Isn’t For Everyone” fue aclamada, Nike generó controversia dejando fuera a Kevin Durant, uno de sus atletas más importantes. (Esto, a pesar que la campaña de los juegos olímpicos, que puse de caso ejemplar en uno de estos artículos, ¡me encantó!)
- Nike ya no lidera la cultura: Antes definía el hype, ahora lo sigue. Adidas, New Balance, On, Hoka, ¡y hasta Crocs!… han logrado capturar la atención de los consumidores jóvenes con mejores estrategias.
- Competencia: Un Nuevo Juego, Nuevas Reglas
- On y Hoka están arrasando: Con un enfoque en tecnología y comodidad, estas marcas han duplicado su cuota de mercado en pocos años.
- Adidas resurgió: La Samba, la Gazelle y sus colaboraciones con Gucci y Wales Bonner han revivido la marca en la moda y la cultura urbana.
- New Balance es el nuevo Nike: Calidad premium, colaboraciones estratégicas y una imagen rejuvenecida la han convertido en la favorita de los consumidores más exigentes.
- Nike descuidó a los adultos: Se enfocó demasiado en el mercado joven (15-18 años) y olvidó que los consumidores de 20-30 años son más fieles y tienen mayor poder adquisitivo.
- El Camino a la Redención: ¿Cómo Puede Nike Recuperarse?
- Volver a la innovación: Menos Air Jordan reciclados, más tecnología nueva y disruptiva. Nike necesita sorprender nuevamente.
- Reformular su estrategia de distribución: Encontrar el equilibrio entre DTC (Directo al Consumidor) y mayoristas sin volverse dependiente de ninguno.
- Innovar su experiencia en tienda: Como ya dije, este es uno de los puntos más débiles y que más necesitan atención. Si Nike quiere seguir siendo la referencia en tenis, pues debe ser la referencia en la experiencia durante la compra.
- Recuperar su posición cultural: Reenfocarse en la música, el arte, la moda y el deporte con campañas auténticas y colaboraciones estratégicas.
- Menos hype, más calidad: Si el consumidor quiere materiales premium y comodidad, Nike debe dárselo. Debe dejar de cortar costos en materiales.
- Rejuvenecer el liderazgo: La salida de Donahoe y la llegada de Elliott Hill podrían traer nuevas ideas y recuperar la magia. Parece que el mercado lo cree y por eso aumentaron las acciones 7% tras su ingreso.
¿Puede Nike Volver a Recuperar el Trono?
- Sí, pero necesita moverse rápido. El mundo del retail y el deporte cambia a velocidad récord.
- Nike tiene historia, recursos y talento. No es una marca cualquiera, pero ha perdido su rumbo.
- La clave está en la autenticidad. Si vuelve a conectar con su esencia, con innovación real y cultura, puede recuperar el trono.
- Volver a la Humildad. Tiene que respetar al consumidor para convencerse de que la gente no va a morir por sus zapatos por la simple marca. Debe despertar y dedicarse a mejorar la experiencia completa de compra y uso por medio de innovaciones radicales y arriesgadas que la vuelvan a poner en el ojo de los adultos jóvenes.
¿Nike está dispuesto a hacer los cambios necesarios, o seguirá apostando a lo seguro hasta que la competencia lo devore?
La Lección importante es que no importa qué tan grande seas, si dejas de innovar, pierdes. Si te alejas de lo que quiere y ama tu cliente, pierdes. Si dejas de escucharlos obsesivamente, pierdes.
Y si pierdes el pulso cultural, dejas de ser relevante.
Nike tiene todas las piezas para volver a la cima. La pregunta es: ¿tendrá la valentía de usarlas?
Si quieres profundizar en este tema y entender cómo poder evitarlo / aplicarlo en tu compañía, escríbeme a mi email gerardo@criterium.com.co